La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, ratificó este jueves que, tras el arranque de la vacunación masiva contra el Covid-19 de los adultos mayores y del personal con funciones esenciales, el próximo 8 de marzo comenzará la inoculación «de forma progresiva» de la población objetivo de pacientes con comorbilidades de entre 18 y 59 años, en orden decreciente de edad.
Dentro de este grupo de enfermos crónicos entran personas diabéticas, así como hipertensas y asmáticas. Según dijo «la idea es ir avanzando como lo hemos hecho hasta ahora de forma progresiva, por edades, por días».
«Este es un acto voluntario y queremos que todos los enfermos crónicos menores de 60 años, de 18 años en adelante, se vacunen obviamente durante el mes de marzo», enfatizó.
Al confirmar esta etapa del calendario, la subsecretaria Daza aseguró que el paciente tendrá que acreditar su condición en el centro de vacunación con «algún documento una receta médica, un certificado o un exámen».
Además, afirmó que dicho documento «no es necesario que sea actualizado», por lo que, por ejemplo, puede haber sido emitido en años anteriores. «En general, las personas que tienen alguna enfermedad crónica es porque están en algún tratamiento que le ha indicado un médico en algún momento de su vida y, por lo tanto, se le va a exigir que muestre ese documento», señaló la subsecretaria.